200

Esta es la entrada 200 de este blog y como siempre, no se bien que escribir.
Estoy frente a un paisaje desértico, que según me cuentan, en cierta epoca del año se llena de flores aunque soy escéptico respecto a eso, es muy amarillo todo acá para que hayan flores multicolores. Seré como Santo Tomás esta vez.
Lamentablemente, no ando en helicóptero, aunque en estos días hubiese sido muy útil. La diferencia, es que si yo utilizara un helicóptero y me quedara en panne de bencina, seguramente, yo tendría que ir a buscar a pata bencina o empujar el helicóptero, sería díficil que llegaran los pacos a llevármela o a lo mejor es un nuevo servicio de los amigos en el camino. Lo que es a mi, solo me paran pa sacarme partes, nunca pa ayudarme.
Sobre el caso de Pilar Pérez, soneré impopular, pero yo también creo (como la jueza que voto en contra, y lo creía antes que votara en contra) que no hay pruebas suficientes ni fehacientes para juzgarla de antemano. La prensa ya hizo su parte y la condenó hace rato, pero vamos a seguir siendo tan corderos para seguir al pie de la letra lo que nos cuenta la prensa? Tal vez ella sea absolutamente culpable, pero no es la obligación del sistema y la nuestra presumir que es inocente y PROBAR que es culpable, o sea hacer la pega. Lo que es tan claro para todo el mundo, entonces dejarlo en evidencia. En este caso, me parece que los fiscales han sido flojos o bien que no se puede probar que es culpable, pero no hay evidencia, por lo menos concluyente.
Sobre Colo Colo mejor ni hablar.
Sobre vacaciones tampoco.
Sobre Chile Sub-20 tampoco
Sobre Goldborne menos.
Sobre la concerta menos.
Me queda solamente el incendio de la Divina Providencia. Que calamidad!!!! Tan linda la iglesia y tan poca importancia que le dan todos, si ni siquiera era MONUMENTO NACIONAL!!!!
Que terrible, seguramente en 2 años o menos habrán unos edificios nuevos en ese lugar y se fue la congregación que le dió el nombre a la comuna, no hay respeto, cero respeto.
Y todo en el post 200.
Se le cuidan. Byes lindos.

PD: Hay que celebrar o no?